Los problemas emocionales y de salud mental son un problema creciente, y con demasiada frecuencia pueden tener un impacto devastador en la salud y el bienestar de quienes los padecen. Afortunadamente, las personas que sufren estrés y ansiedad han aportado pruebas positivas del uso del aceite de CBD para ayudar a complementar el tratamiento de sus síntomas.
Se cree que el CBD tiene esta capacidad al actuar dentro del sistema endocannabinoide (SCE) del organismo para interactuar con los receptores CB1 y CB2 del sistema nervioso. El propósito de nuestro sistema endocannabinoide es equilibrar y regular nuestro cuerpo para mantener la homeostasis, lo que hace que su compatibilidad con nuestro sistema endocannabinoide sea un descubrimiento asombroso en el camino hacia la comprensión de cómo funciona el CBD y sus posibles usos terapéuticos.
Las nuevas investigaciones científicas han consolidado estas afirmaciones, sugiriendo que el CBD puede tener la capacidad de regular los niveles de serotonina del organismo al interactuar con los receptores cannabinoides del cerebro para producir efectos potencialmente antidepresivos. La serotonina es una hormona que estabiliza nuestro estado de ánimo, influye en nuestra sensación de felicidad y bienestar y también interviene en factores como el apetito, la digestión y el sueño. Además, se cree que el papel del CBD en el sistema ECS puede tener la capacidad de reducir los altos niveles de cortisol, la hormona del estrés del cuerpo.
Dado que los problemas de sueño, como el insomnio, son un efecto secundario común del estrés y la ansiedad, se espera que la reducción de los síntomas de la causa mejore la calidad del sueño de los usuarios.
Se cree que el CBD tiene esta capacidad al actuar dentro del sistema endocannabinoide (SCE) del organismo para interactuar con los receptores CB1 y CB2 del sistema nervioso. El propósito de nuestro sistema endocannabinoide es equilibrar y regular nuestro cuerpo para mantener la homeostasis, lo que hace que su compatibilidad con nuestro sistema endocannabinoide sea un descubrimiento asombroso en el camino hacia la comprensión de cómo funciona el CBD y sus posibles usos terapéuticos.
Las nuevas investigaciones científicas han consolidado estas afirmaciones, sugiriendo que el CBD puede tener la capacidad de regular los niveles de serotonina del organismo al interactuar con los receptores cannabinoides del cerebro para producir efectos potencialmente antidepresivos. La serotonina es una hormona que estabiliza nuestro estado de ánimo, influye en nuestra sensación de felicidad y bienestar y también interviene en factores como el apetito, la digestión y el sueño. Además, se cree que el papel del CBD en el sistema ECS puede tener la capacidad de reducir los altos niveles de cortisol, la hormona del estrés del cuerpo.
Dado que los problemas de sueño, como el insomnio, son un efecto secundario común del estrés y la ansiedad, se espera que la reducción de los síntomas de la causa mejore la calidad del sueño de los usuarios.